Restaurante La Table du Sud

Situado en el corazón de una encantadora calle peatonal, este pequeño restaurante es un refugio acogedor donde se sentirá como en casa. Lo esencial es la cocina casera, los platos cocinados a fuego lento, el ambiente íntimo y los sabores cercanos y lejanos que rinden homenaje a la tradición.

En el pequeño comedor, de capacidad deliberadamente limitada, las pocas mesas crean un ambiente cálido y familiar. Aquí podrá compartir una blanqueta de ternera que se deshace en la boca, unos sabrosos calamares rellenos o una tarta de cebolla delicadamente dorada.

Y si lo que busca es una escapada culinaria, el generoso cuscús real y la aromática musaca, que se ha convertido en un firme favorito, le llevarán al otro lado de la frontera sin moverse de su asiento.

La Table du Sud es más que una comida: es un momento de compartir, de calidez y de placer en el corazón de la ciudad.

A la hora de los dulces, déjese tentar por las especialidades de la casa: tarta de limón o naranja con merengue, makrout y cuernos de gacela, todo preparado con esmero.

Aquí, todas las preparaciones se realizan ante sus ojos: un auténtico regreso al sabor de la comida casera.
No olvide reservar: se trata de una dirección popular y las plazas son limitadas.